Los informes de suelos, establecidos por el Ministerio de Medio Ambiente de cada comunidad autónoma, buscan equilibrar la calidad ambiental con el progreso económico. Estos informes identifican actividades que pueden causar contaminación, ya sea en sectores industriales o comerciales, particularmente aquellos que involucran sustancias peligrosas.
De acuerdo con el Real Decreto 9/2005, de 14 de enero, cualquier actividad considerada contaminante debe contar con un informe previo del suelo, que deberá presentar al Ministerio de Medio Ambiente. Este informe es fundamental para garantizar que las empresas no infrinjan la normativa medioambiental y estén preparadas para posibles inspecciones.